CONIL

FLOTA PESQUERA

La flota de Conil se compone de unos cincuenta botes artesanales, con unas características técnicas y sociales muy homogéneas.

Flota pesquera de Conil

Vista del muelle y la flota pesquera de Conil.

Flota pesquera de Conil

La flota de Conil se compone de unos cincuenta botes artesanales, con unas características muy homogéneas.

Flota pesquera de Conil

Las embarcaciones son de pequeño porte, entre 8 y 9 metros de eslora.

Flota pesquera de Conil

En la proa se ubica el virador para cobrar las redes.

Flota pesquera de Conil

En la popa, que suele ser cortada, queda instalado un pórtico, cuadrado, para largar los artes de enmalle.

Flota pesquera de Conil

En cada embarcación se enrolan entre dos y tres marineros.

Flota pesquera de Conil

Embarcación entrando por la bocana del puerto.

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Se trata de los barcos herederos de aquellos jabegotes y pescadores de “barquillos” que constituyeron la actividad durante el siglo XX, cuando no existía refugio y los marineros locales se enrolaban, en su mayor parte, en flotas de otros puertos. En cada bote se enrolan entre dos y tres marineros, siendo habitual que compartan también la propiedad cuando las relaciones entre ellos son de parentesco. Se trata de botes de pequeño porte (entre 8 y 9 metros) –aunque mayores que las antiguas embarcaciones de madera, apenas sin puente-, que se han construido desde los años noventa gracias a Planes de Puerto que se confeccionaron desde la cofradía.

El papel financiero de los fondos estructurales europeos ha sido fundamental para llevar a cabo la modernización de la flota. Los nuevos barcos se construyen en nuevos materiales (poliéster en su mayor parte, aunque subsisten algunos de madera) y están dispuestos con los equipos electrónicos habituales en la flota pesquera de este tamaño (sonda electrónica, GPS, plotter, radiobalizas, radar…). Esta profunda remodelación, de la que han surgido distintos prototipos, dota a esta flota de una llamativa homogeneidad formal.

Así, los botes disponen de un puente en el que se coloca el patrón de pesca para dirigir la navegación, la búsqueda del caladero y la localización de los lances. En la popa, que suele ser cortada, queda instalado un pórtico, cuadrado, para largar los artes de enmalle, mientras que en proa se ubica el virador para cobrar las redes. Los botes de palangre tienen un virador en forma de disco, y los que se desplazan al Estrecho, ya en aguas de Marruecos, para la captura del sable iniciaron la práctica de colocar una cubierta sobre las bandas y la popa del buque, para resguardar a los marineros durante sus faenas. Ello se debe a que sus expediciones se realizan a caladeros más alejados, y sus condiciones de trabajo son más exigentes. Además, estos buques se han construido con maquinillas de palangre y de red, para que los armadores pueden decidir qué pesquería utilizar en función de las circunstancias.

Atlas del Patrimonio Cultural en los Puertos de Interés Pesquero de Andalucía

Agencia Pública de Puertos de Andalucía Universidad de Sevilla Unión Europea

Consejería de Fomento y Vivienda. Agencia Pública de Puertos de Andalucía

Proyectos de I+D+i 2013-2015.

Dinamización de los enclaves pesqueros del Sistema Portuario Andaluz.