LONJA
La lonja de Caleta es una de las más importantes de Andalucía, tanto en descargas como en valoración comercial.
Junto al pulpo, la sardina –Caleta es el puerto más importante de esta especie-, el boquerón, la caballa y el jurel constituyen las principales aportaciones en la subasta, evidenciando la importancia de la flota de cerco. Además de las embarcaciones con origen en Caleta de Vélez son numerosas las foráneas que atracan en este puerto para participar en las subastas diarias, y esto es debido tanto a los buenos precios como al buen funcionamiento de esta lonja, gestionada por la cofradía de pescadores. Así, acuden a vender más de cien embarcaciones para casi el doble de compradores.
Arquitectónicamente, esta construcción de los años setenta destaca por su remate a base de arcos de medio punto, que fueron realzados en la fachada con viseras en 1995. Desde 2004 la subasta está informatizada.
Además de espacio comercial para la transacción económica entre compradores y pescadores, patrones o armadores, la lonja es un lugar preferente para la sociabilidad de la población. Las subastas de la mañana son visitadas por muchos mayores, al igual que las de la tarde a la que acuden también numerosos jóvenes, niños y niñas. Así lo relatan los pescadores jubilados que cada día se acercan a contemplar la subasta: “Si uno no va a la lonja, ¿pues adónde va a ir?”. A todo ello se suma el reciente interés turístico por este espacio y sus actividades, lo que lo consolida como un lugar multifuncional, reflejo de la complementariedad de usos comerciales, sociales y turísticos. Así la riqueza de esta lonja además de por su espectacular actividad económica es medida por su continuo bullicio y su integración en las vidas cotidianas de la población calateña y visitante.
Son imágenes habituales del puerto las traíñas que, acompañadas por el escandaloso bullicio de las gaviotas que planean sobre sus cubiertas anunciando su entrada al muelle de descarga, desembarcan sus capturas desde las primeras horas de la madrugada para su venta en la primera subasta: sardinas, boquerones o jureles de escamas brillantes y plateadas y tornasoladas. También los grupos de pescadores que, arrodillados en las cubiertas, organizan las capturas rodeados de multitud de especies de pescados. Por la tarde regresan las vacas o arrastreros originando gran expectación en torno a las capturas desembarcadas (mariscos, bacaladillas, pulpos, salmonetes o merluzas), que son subastadas junto a las capturas de la flota de artes menores, que aportan sobre todo el pulpo. La subasta de la tarde es un constante disfrute para los sentidos por la diversidad de especies, su excelente estado de conservación y la vida que se origina en torno a la venta. Además, el corruco se vende directamente a una empresa conservera, tras pasar por el centro de expedición. Todo este trajín matinal y vespertino es contemplado por numeroso público formado no sólo por vendedores, subastadores y compradores, sino también por vecinos y curiosos turistas.
Atlas del Patrimonio Cultural en los Puertos de Interés Pesquero de Andalucía
Consejería de Fomento y Vivienda. Agencia Pública de Puertos de Andalucía
Proyectos de I+D+i 2013-2015.
Dinamización de los enclaves pesqueros del Sistema Portuario Andaluz.