LOS PAISAJES DEL PUERTO
El fondeadero natural de Marbella ha estado vinculado desde tiempos remotos a la extensa franja costera comprendida entre la desembocadura de Río Verde y Arroyo Real, y custodiada por la imponente silueta de Sierra Blanca, que se convierte en referente visual desde cualquier lugar de su costa.
El actual recinto portuario se abre al mar desde el núcleo principal de la población marbellí. Sin embargo, la alta densidad urbana de su entorno hace que el puerto resulte prácticamente desapercibido para sus habitantes y visitantes: estamos ante un reducto de marineros y pescadores, escondido entre playas turísticas, oficinas, hoteles y viviendas de lujo, que constituyen el paisaje predominante de su entorno. Sin embargo, desde el paseo marítimo en su extremo oriental o desde las escolleras de las playas continuas al puerto, se pueden observar los muelles y embarcaciones que invitan a su visita.
En el interior del puerto están siempre presente, como referentes visuales, los modernos edificios que se ciernen sobre el recinto, mientras la Sierra Blanca sirve como telón de fondo de atraques, embarcaciones y muelles. Así mismo, es posible contemplar desde el extremo de poniente el barrio de pescadores de “La Bajadilla”, constituido por viviendas de una sola planta, dispuestas a distintos niveles para adaptarse a la orografía del terreno. Hacia el este, se divisan los restos de una de las torres utilizadas el pasado siglo para el transporte y carga del mineral.
Atlas del Patrimonio Cultural en los Puertos de Interés Pesquero de Andalucía
Consejería de Fomento y Vivienda. Agencia Pública de Puertos de Andalucía
Proyectos de I+D+i 2013-2015.
Dinamización de los enclaves pesqueros del Sistema Portuario Andaluz.